El precio de la trufa viene marcado por muchos factores y uno de ellos es el cultivo: un desarrollo complicado y laborioso. Por eso es una delicatessen tan costosa dentro del abanico de productos gastronómicos que se pueden encontrar en el mercado. A pesar del alto riesgo a nivel económico que conlleva su desarrollo y cosecha, se siguen produciendo, por la sencilla razón de que una demanda estable entre los grandes amantes de la cocina. Además, hay que remarcar que se ha extendido entre el gran público en los últimos años.

Por ese motivo, por los adeptos que congrega este diamante negro, por su potentísimo aroma y por su sabor

inconfundible como complemento para la carne, huevos o pescados; la trufa es una estrella culinaria y lo será por mucho tiempo.

Sin embargo, al precio de la trufa negra le afectan muchos factores y, especialmente, los intermediarios, que quieren su margen al comerciar con este producto. Estos eslabones intermedios encarecen notoriamente el proceso, y eso repercute en el bolsillo del consumidor final.

Productores: la clave de la trufa al mejor precio

Nosotros somos productores de trufa y por eso vendemos el kilo a un precio sin parangón y con el producto recién sacado de la tierra. Nos centramos en garantizar la máxima frescura y el envío rápido para que el cliente lo reciba con todas sus cualidades.

Pero no solo nuestro kilogramo, destinado a restaurantes o grandes eventos, tiene un precio competitivo. El precio de nuestra trufa también es inmejorable en sus versiones de 30 gramos, para el cliente individual. Tanto en la trufa Extra, en la trufa Primera y la trufa en trozos, ofrecemos un precio incomparable. Estamos empeñados en apoyar este proceso de popularización de su consumo porque la trufa tiene todavía muchísimo recorrido en el mercado español y porque estamos convencidos de que mucha gente no la conoce todavía.

El proceso productivo es el siguiente, en cuanto el cliente entra en nuestra web y adquiere una de nuestras trufas a buen precio, cosechamos su trufa en las horas sucesivas, la lavamos para dejarla impecable, la pasamos por una máquina de ultrasonido que elimina las bacterias y microorganismos, y lista para servir, y la empaquetamos en un lujoso envase. El envío urgente garantiza una entrega en las próximas 24-48 horas, así que el comprador la recibe en su vivienda en un plazo inferior a las 72 horas, y puede disfrutar de la trufa fresca, sin congelarla, unos 15 días más, si la conserva en la nevera. Como pueden observar, nuestra atención no puede ser más inmediata y es que sabemos que la trufa recién cogida es cuando mejor sienta en el paladar.

Esperamos que os haya gustado la explicación de nuestro proceso desde la perspectiva del productor.